Mi historia con The Lazy Dreamers
Al final del último capítulo, The Lazy Dreamers actuaban por primera vez como banda de cuatro. Fue un comienzo fantástico y un concierto inolvidable, pero para uno de nosotros, ser un "soñador perezoso" no iba a poder ser algo a largo plazo.
Teddy Strings andaba liadísimo con su propia banda, su proyecto en solitario y sus colaboraciones con otros músicos como productor, para mí estaba claro que no iba a tener el tiempo necesario para construir una banda nueva prácticamente desde cero. Lamentablemente, ya que tener a Teddy alrededor es una maravilla (tanto desde el punto de vista personal como musical), ambos estuvimos de acuerdo en que sería lo mejor encontrar un nuevo cuarto miembro para el grupo. El espectáculo debía continuar, y así fue, pero TLD nunca olvidaremos a Teddy y su gran contribución en nuestros duros comienzos. Aquí lo tenéis, arte y figura, Teddy Strings.
Teniendo a Vladi y sus múltiples talentos de nuestra parte, el encontrar al cuarto en discordia no era tanto cuestión de hacerse con otro batería como de dar con la persona adecuada y la energía adecuada. Una vez determinado lo que esa persona estuviera en disposición tocar, Vladi tocaría cualquier otra cosa que hiciera falta. Lo cierto es que no fue difícil, miramos a nuestro alrededor y encontramos dicha energía ahí mismo, en forma de An Hyo Kyong, el compañero de habitación de Max.
Estaba claro que le gustaba la música, era un buen estudiante y tocaba un poco la guitarra, pero, sobretodo, era el tipo más majo que nos habíamos echado a la cara, así que no había otra: era perfecto para el trabajo. Una tarde en la habitación de Max, el pobre H (así decidió que le llamáramos al poco tiempo, probablemente harto de oír su nombre mal pronunciado cada vez), se encontró con un dedo apuntándolo directamente y un inmediato nombramiento oficial como nuestro nuevo bajista, no creo ni que le preguntáramos si le parecía bien o no, ¡jeje!
Aunque el bajo no era su instrumento, la transición hacia la nueva formación fue de lo más suave, gracias a su propio esfuerzo y, desde luego, a la destreza de Vladi a la batería (resulta que es el primer instrumento que estudió, así que no es que se las apañe con él, no, el tío ES batería). Tras un primer concierto casi inmediato en la universidad para el Festival Cultural Internacional, empezamos a tocar cada fin de semana en garitos de por toda la ciudad, y mientras duró fue como vivir un sueño. Aquí tenéis algunas fotos.
Ahí teneís resumido el año escolar 2014-2015 de The Lazy Dreamers. Continuará...